viernes, mayo 09, 2008


Hace un mes no me imaginaba que iría a todos los sitios a los que estoy yendo e iré durante estos próximos cuatro meses. Alucino de estar aquí en México compartiendo con tantos colectivos, músicos, poetas, maestros, mujeres asombrosas, mucha risa, mucha contemplación, mucho cansancio, mucho saber y placer. Ando en busca de una maquiladora de papel redondo. Hoy anduvimos todo el día por Puebla paseando, contando ángeles en la catedral, riéndonos en frente del órgano más bonito del mundo porque en el techo de la cúpula había una inscripción memorable. También estuvimos en Cholula. Allí en ese pueblo está la pirámide más alta de mesoamérica con una iglesia en la cima. Así de bizarro y obvio. Es el pueblo en el que primero atacó Cortés. Convocándolos a todos para supuestamente despedirse, los mató. A los más relevantes para la comunidad, como los chamanes, los mató con perros mordiéndoles el cuello. (También me contaron que es el pueblo con más discotecas techno del mundo) Esta foto es desde la cima de la pirámide que ahora es iglesia. Se podía atravesar la pirámide completa de un lado a otro, pero preferí ir por fuera porque la verdad me dio claustrobia por lo estrecho, largo y oscuro. Cuando bajaba de la pirámide, unos italianos se tomaban fotos pretendiendo comerse chapulines que no se comieron.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

palabréame